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DRIP DROP

The Drip Drop invita a los participantes a silenciar sus pensamientos y entrar en una experiencia multisensorial. Es una cápsula física que contiene sonidos para realizar un viaje auditivo a través de la naturaleza, la ciudad y otros lugares abstractos. Se utilizan sonidos específicos para provocar reacciones mentales y físicas asociadas con imágenes sónicas de inspiración que emulan una experiencia astral.

Una escultura de sonido inmersivo

2017, Portland, Oregón

Diseño y concepto: Candi X

Diseño de sonido: Hillary Murphy

Renderizado y diseño 3d: Mikele Schnitman

Fabricantes: Escape Collective

Creé esta cápsula mientras dirigía mi empresa de cannabis, Drip Sweets. Lo pensé como una herramienta educativa para compartir con la gente un tipo de experiencia que puede ser posible al consumir los comestibles. El diseño exterior de Drip Drop utiliza formas y ángulos geométricos rígidos para hablar de la estructura y la complejidad que son necesarias para albergar experiencias profundas. En contraste, el interior está lleno de almohadas suaves y esponjosas, las cuales hablan de la dulzura que se anima a tener en este momento de profundo descubrimiento interior.

La forma geométrica rígida de la Drip Drop habla de la idea de una estructura seria y la complejidad de los muchos ángulos que se necesitan para formar una experiencia única, en este caso relacionada con una planta medicina, pero que también se aplica a la vida en general.

 

¡Fue increíble experimentar con la creación de una escultura funcional de tamaño humano! Me encontré con algunos desafíos al convertir mi idea de un simple dibujo en realidad, lo que facilitó mi aprendizaje sobre cómo comunicarme con mayor claridad con los artistas y fabricantes 3D. Algunos comentarios que recibimos: “Tal vez así es como se supone que debe sentirse la meditación”. - Clara Daniel. “Era escéptico acerca de que una experiencia en una cápsula me moviera algo, pero me voló la cabeza. -Kerry Jamie “Fui a todo tipo de lugares y me sentí realmente regenerada después” - Ariel Petterson

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